Cincuenta y cinco ayuntamientos andaluces se incorporan al Sistema de Seguimiento Integral de los casos de Violencia de Género del Ministerio del Interior

Cincuenta y cinco ayuntamientos andaluces se incorporan al Sistema de Seguimiento Integral de los casos de Violencia de Género del Ministerio del Interior

15/11/2011

  •  Su objetivo es integrar recursos, evaluar riesgos, y establecer un seguimiento eficaz de las medidas de protección
  • Desde que comenzó a funcionar el sistema, se han realizado 838.225 valoraciones de riesgo, 195.327 en Andalucía

11 de noviembre de 2011. El secretario de Estado de Seguridad, Justo Zambrana, ha presidido en Granada la firma de los acuerdos de colaboración con treinta y cinco ayuntamientos de las provincias de Almería, Granada, Jaén y Málaga, por los que sus policías locales se incorporarán al Sistema de Seguimiento Integral de los casos de violencia de género del Ministerio del Interior. Ayer, veinte consistorios de las provincias de Cádiz, Córdoba, Huelva y Sevilla suscribieron su adhesión al sistema.

Los municipios de la provincia de Cádiz que comenzarán a utilizar este sistema desarrollado por la Secretaria de Estado de Seguridad son: Algeciras, Chiclana y Puerto Real. Los de la provincia de Córdoba son: Pedro Abad, Villafranca, Puente Genil, La Carlota, Lucena, Montoro, Espejo, Cabra y Palma del Río. Por su parte, los ayuntamientos de la provincia de Huelva son Lepe, La Palma del Condado, Almonte e Hinojos y por parte de la de Sevilla, Lora del Río, Tomares, San Juan de Aznalfarache y La Rinconada. Estas incorporaciones adquieren un mayor significado ya que hasta ahora, sólo los ayuntamientos de Córdoba y Sevilla estaban integrados en el Sistema.


En Andalucía Oriental, los municipios de la provincia de Almería que comenzarán a utilizar este sistema desarrollado por la Secretaria de Estado de Seguridad son: Garrucha, Huércal-Overa, Mojácar, Pulpí y Vícar. Los de la provincia de Granada son Albolote, Alfacar, Armilla, Atarfe, Baza, Cúllar Vega, Deifontes, Fuente Vaqueros, Granada, Guadix, Güejar Sierra, Huéscar, Huétor Vega, Las Gabias, La Zubia, Loja, Maracena, Monachil, Montefrío, Motril, Ogíjares, Órgiva, Padul, Peligros, Pinos Puente, Santa Fe y Salobreña. Por su parte los ayuntamientos de la provincia de Jaén son Úbeda y Linares y de la de Málaga Archidona.

Aplicación informática

Se trata de una aplicación informática que integra la información y los recursos operativos para asistir a las víctimas. Desde que comenzó a funcionar en agosto de 2007, el sistema ha gestionado información sobre 229.454 mujeres, 50.436 en Andalucía y, de ellas, 5.793 en Almería, 6.034 en Granada, 3.448 en Jaén y 10.457 en Málaga.

El sistema actualmente cuenta con más de 30.000 usuarios y hasta antes de la incorporación de los municipios de ayer, se habían firmado acuerdos en toda España con 72 ayuntamientos, con un total de 1.161 policías locales habilitados para la utilización del Sistema. En total, la Secretaria de Estado de Seguridad ha formado a 283 agentes locales en Andalucía.

Según Justo Zambrana, este esfuerzo, en materia de formación, se traducirá en una mejora en la atención a las víctimas, en la medida que se dota a las policías locales de un matiz de policía judicial. Según el secretario de Estado de Seguridad, “las policías locales disponen de un conocimiento de proximidad que puede ser de mucha utilidad”. En este contexto, Justo Zambrana ha querido recordar también el esfuerzo realizado, en materia de formación, por las FCSE, que han aumentado el número de especialistas en más de un 200%.

Una vez firmado el acuerdo de colaboración, el Ministerio del Interior y los ayuntamientos adecuarán sus sistemas informáticos para permitir las conexiones necesarias. La Secretaría de Estado de Seguridad ya ha formado a los nuevos usuarios del sistema para que conozcan su contenido y su funcionamiento. Asimismo, y con la finalidad de hacer el seguimiento de su desarrollo, se constituirá una Comisión Técnica de Seguimiento, integrada por tres representantes de cada una de las partes.

Esta aplicación sitúa a la víctima de violencia de género en el centro de un sistema que tiene por objetivos: aglutinar a las instituciones que intervienen en la protección y seguridad de las víctimas de violencia de género (Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, policías autonómicas y locales, fiscales, jueces, Instituciones Penitenciarias, Unidades de Coordinación y de Violencia sobre la Mujer y Servicios Sociales); integrar en una sola base de datos toda la información sobre las circunstancias que rodean a las víctimas de violencia de género; realizar “valoraciones del riesgo” de la víctima de sufrir una agresión y adoptar las medidas de protección necesarias; e implantar un sistema de avisos, alertas y alarmas que permita, según los protocolos establecidos, reaccionar de forma rápida y eficaz.

La valoración de riesgo

La valoración del riesgo de la víctima de violencia de género se realiza a través de una herramienta construida a partir de 40.000 casos reales y validada por un equipo de catedráticos universitarios y especialistas de la Policía Nacional, la Guardia Civil e Instituciones Penitenciarias.

Con ella, los especialistas policiales determinan el riesgo de la víctima de sufrir una agresión, diferenciado en cuatro niveles: extremo, alto medio y bajo. Estos niveles se revisan de forma periódica, a las 72 horas (en el caso del extremo), 7 días (alto), 30 días (medio) y 60 días (bajo), y también cuando lo disponga la autoridad judicial o el fiscal, o existan nuevas circunstancias que afecten a la víctima o al agresor.

Con esta herramienta se han realizado 838.225 valoraciones de riesgo,(195.327 en Andalucía), incluida en esta cifras las revisiones que se efectúan de forma periódica. Estas valoraciones se incorporan al atestado policial y se comunican a la autoridad judicial y al fiscal, y generan una serie de avisos (sobre cualquier circunstancia relacionada con la tramitación de cada caso), alertas (sobre una nueva situación que pueda elevar el nivel de riesgo de la víctima), y alarmas (sobre la inminencia de una situación grave para la seguridad de la víctima).