La Policía Nacional detiene en Bilbao a dos de los últimos integrantes de una red de tráfico de seres humanos que había comerciado con más de 50 mujeres

22/03/2021

  • Ambos habían escapado a su país de origen, en Malí, para evitar ser capturados
  • La organización criminal había sido desarticulada a principios del año pasado, saldándose con la detención de diez de sus miembros

 

Agentes del Grupo I de UCRIF, de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Bilbao, han procedido a lo largo de la pasada semana a la ejecución de una operación que tenía como objetivo la detención de los últimos integrantes de una organización criminal dedicada facilitar el paso de ciudadanos africanos hacia Europa pasando por Euskadi. A los dos detenidos se les imputan presuntos delitos de tráfico de seres humanos y de pertenencia a organización criminal.

La operación que dio origen a esta última fue llevada a cabo conjuntamente entre el Grupo I de UCRIF de Bilbao y la Comisaría General de Extranjería y Fronteras de Madrid, y se inició a finales del año 2019, cuando los investigadores tuvieron conocimiento de que un gran grupo criminal, compuesto por, al menos, 12 personas originarias de Camerún, Sierra Leona, Malí y Liberia, entre otros países del Golfo de Guinea,  estaban   captando a mujeres que habían entrado irregularmente a España.

 

El modus operandi consistía en aprovechar la desesperada situación personal y familiar de mujeres provenientes del continente africano que pretendían entrar a España, o ya habían entrado clandestinamente por el sur de la península, para acercarse a ellas a través de contactos que el grupo tenía en Marruecos y en asociaciones de asistencia y ayuda a la inmigración asentadas en Algeciras, Teruel, Córdoba o Sevilla, y ofrecerlas cruzar la frontera de Francia, a través de Irún, a cambio de una sustancial compensación económica.

A las víctimas que aceptaban les facilitaban la llegada en autobús hasta Bilbao, donde, ya en la estación, eran recogidas por diferentes miembros del entramado criminal. Después de la recogida, eran trasladadas en vehículos hasta pisos del barrio de San Francisco, donde eran alojadas a la espera del momento propicio para ser llevadas, también en coches particulares o en autobús, hasta San Sebastián o Irún, para, posteriormente, ayudarlas a cruzar la frontera con Francia.

En este sentido, los investigadores tienen constancia de que el grupo traficó con, al menos, 51 mujeres.

Asimismo, en febrero del año pasado los agentes detuvieron a diez integrantes de la organización, sin embargo, un reducido número de ellos logró huir a sus países de origen, por lo que, finalmente y tras una paciente espera de los investigadores, que siempre estuvieron pendientes de un posible retorno a Euskadi, el lunes y miércoles pasados procedieron a la detención de dos de los evadidos, ambos nacionales de Malí.